Vivencias y reflexiones de un maestro en nuestra Andalucía contemporánea

lunes, 4 de julio de 2011

Cuentos inmorales

Érase una vez un maestro de Matemáticas que daba clases de Sociales en un Instituto a un grupo de 2º de ESO.


Tenía a 30 alumnos que lo más parecido a una “o” que conocían era una onza de chocolate.


Diagnosticada la clase, les advirtió que para aprobar en junio (lo de que aprendieran algo de Historia o Geografía lo aplazó para más adelante) debían de presentar el viernes lectivo de la semana siguiente a la que terminaran cada uno de los 15 temas, el cuaderno con todas las actividades que el maestro propusiera debidamente corregidas. Éste, y sólo éste (el comportamiento correcto en clase se presuponía) era el método para aprobar.


Se acogió con enorme algarabía esta manera de aprobar, de tal forma que se llegó hasta el Tema 14 con todos los alumnos en disposición de superar la asignatura... pero...


El Tema 15 se terminó el jueves 7 de junio y, por tanto, el cuaderno lo tenían que presentar el viernes 15 de junio. De los 30, 24 así lo hicieron; otros 5 no lo presentaron alegando que ya lo habían hecho otras 14 veces anteriores y ya les valía para aprobar; y 1 (Kiko) lo hizo el lunes 18, es decir el siguiente, alegando que así lo había hecho con los 2 últimos temas (13 y 14) al no asistir a clase los dos viernes señalados para la entrega y el maestro lo había aceptado.


Salieron las notas y habían aprobado 24. Los otros 6, para septiembre.


Kiko reclamó de manera correcta ante el maestro, el Departamento de Sociales y el Director del Centro... pero nadie le escuchó y sus padres lo castigaron todo el verano sin salir, sin play y sin vacaciones por estar Suspenso.


Los otros 5 reclamaron al Director, que les dijo que no se podía hacer nada, y, entonces, hablaron con sus mamás, con sus papás, con sus amigos y con sus vecinos y, todos juntos, en patrullón, con la televisión local y un redactor del periódico del pueblo acompañándoles, se presentaron en el Instituto amenazando con no irse de allí hasta que los aprobaran.


Ante semejante alarma social, el Director se reunió con su claustro, y dictó sentencia: Aprobados.


¿Qué hubieras hecho tú? ¿Crees que se actuó con justicia? ¿No consideras agravio comparativo el aprobar a esos 5 y no al que, por circunstancias, lo presentó el lunes? ¿Estimas la pena (suspenso) acorde con el delito (presentarlo el lunes, tal como había hecho los dos anteriores)? ¿Crees que un director que cede ante las presiones está facultado para dirigir un instituto? Es verdad que ninguno de los 6 hizo lo que tenía que hacer; pero... ¿quién se merecería aprobar con más razón?


YO TAMBIÉN SOY KIKO

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SECCIÓN OLVIDOS CON SENTIDO

¿Sabías que...


... la vicepresidenta del Gobierno catalán, Joana Ortega, presentó al Parlamento autonómico catalán su currículum mintiendo al escribir que era licenciada en Psicología, sin haber acabado la carrera?

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SECCIÓN UN PAÍS DE CHISTE

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